Me gusta hacer recetas de otros blogs que me llaman la atención y esta ha sido una de ellas, es la segunda vez que la hago, la primera la hice el mismo día que la vi y esta la hice por partida doble pensando que durarían el doble y han durado muy poco porque estaban buenísmos, la receta la vi en el blog de las cosillas de islacris, así aprovecho para felicitarla ya que anteayer fue su cumple, y aprovecho también para que mi amiga Sofía vea como le saco partido a esa bandeja tan mona que me regaló cuando vino a visitarme.
Ingredientes:
500 gr. de harina de fuerza
250 ml. de buttermilk
15 gr. de levadura fresca
60 gr. de mantequilla temperatura ambiente
40 gr. de azúcar
10 gr. de sal
2 huevos
Crema de cacao
Preparación:
Mientras vamos sacando ingredientes, preparamos la buttermilk.
250 ml. de leche tibia.
Zumo de medio limón.
Removemos y lo dejamos unos 10 minutos.
La receta que vi lo amasó con la famosa K.A. yo como no tengo me arreglé con una batidora de varillas y quedó fenomenal.
En un bol pondremos en primer lugar la buttermilk, la levadura desmenuzada, el azúcar, los dos huevos semibatidos, la harina, la sal y por último la mantequilla.
Con la batidora lo mezclamos todo, primero a poca velocidad y si podemos un poco más y lo mezclamos todo lo bien que se pueda.
La masa resultante es un poco pegajosa.
Con ayuda de un poco de aceite hacemos una especie de bola.
Tapamos el bol con papel film y lo dejamos en reposo toda la noche en el fondo del frigorífico.
A la mañana siguiente vamos a hacer nuestros bollos.
Sacamos la masa.
Desgasificamos encima de una superficie fría.
Dividimos la masa en porciones de aproximadamente 65 gr. y nos saldrán unos 16 grupos.
Con ayuda de la superficie un poco enharinada colocamos una porción y estiramos con el rodillo. Rellenamos con una cucharada de crema de cacao a lo largo y cerramos el bollito. Lo hacemos rodar sobre la superficie y lo colocamos en la bandeja del horno, dejamos separados unos de otros ya que aún deberán levar.
Una vez hechos todos y colocados en dos bandejas los dejamos en el horno apagado sobre una hora hasta que doblen el volumen.
Cuando hayan subido, los sacamos, precalentamos el horno a 200ºC.
Bajamos la temperatura a 180ºC y horneamos unos 10/15 minutos, hasta que se doren un poquito.
Dejamos enfriar sobre una rejilla.
Y ahora hay que comérselos todos porque están buenísimos.
Buen provecho!!